martes, 8 de abril de 2014

La 122.

"Todo cabrón que busque un buen chocho para pasar la noche será bienvenido.
La tercera copa siempre será gratis mientras sigas vivo.
Con unas hermosas vistas al vertedero de enfrente, nuestras habitaciones cuentan con minibar, agua potable, y televisión por cable.
No se lo piense, ¡traiga a su amante! Contamos con los asesinos a sueldo más profesionales, por un módico precio podrán incluso deshacerse de su cadáver, ofertas especiales todos los jueves.
Vengas, señoras y señores, no se arrepentirán, jamás hemos tenido cliente insatisfecho que no esté enterrado en el patio de atrás."

John, hace tiempo que recuerdo la 122,
en aquel motel de Carretera Mala Muerte
y cómo el calibre de tu pistola encajaba perfectamente
con el crimen de aquellas vírgenes.

Siempre encontraremos la paz
en esta habitación perpetua.
La 122, con desayuno y televisión, piensas.
Y sonríes, Johnny porque
tú siempre te haces de rogar.

Cada noche en la
122
desnudo en tu cama
te haces el amor.

Cada mañana en la
122
a través de
tu ventana
puedo imaginarte esperar
envuelto en llamas.